Título: La Gran belleza (La Grande Bellezza)
Año: 2013
Director: Paolo Sorrentino
En Roma, durante el verano, nobles decadentes, arribistas, políticos, criminales de altos vuelos, periodistas, actores, prelados, artistas e intelectuales tejen una trama de relaciones inconsistentes que se desarrollan en fastuosos palacios y villas. El centro de todas las reuniones es Jep Gambardella (Toni Servillo), un escritor de 65 años que escribió un solo libro y practica el periodismo. Dominado por la indolencia y el hastío, asiste a este desfile de personajes poderosos pero insustanciales, huecos y deprimentes. (Filmaffinity)
La Gran Belleza narra las andanzas de Jep Gambardella (Toni Servillo), autor de un único libro que se convirtió en best-seller en su momento. Actualmente su ocupación consiste en dar y asistir a las fiestas de la alta (y aburrida) sociedad romana que lejos de afrontar su situación y la palpable decadencia social, se reúnen como siempre para bailar como nunca.
“Son bonitos los trenecitos que hacemos en las fiestas, ¿verdad?, Son los más bonitos del mundo porqué no van a ninguna parte.”
Como dice el propio Gambardella en una escena, "decidí convertirme en un mundano, pero no cualquiera, si no en el rey de la mundanidad". La palabra "mundano" no es gratuito: todo su mundo, el continuo festejo, el champán, las mujeres y la fiesta son cosas mundana, no celestiales, sin ningún valor moral, ético y cultural. El mundo que rodea al escritor es materialista, despreocupado por su entorno.
“- ¿Qué tenéis en contra de la nostalgia, eh?
- Es la única distracción posible para quien no cree en el futuro. ”
Por otro lado, la mundanidad describe los "quehaceres" de la alta sociedad, cuyos representantes, muchos de ellos están en decadencia: desde poetas que nunca hablan "porque siempre escuchan" y falsas activistas que se vanaglorian con su pasado marcado por compromiso social mientras empolvaban la nariz en los lavabos de la universidad hasta aristócratas que se alquilan a si mismos para asistir a uno u otro evento que requiere presencia noble (su noche ronda de 250 euros o más por persona).
Lo curioso y lo interesante es que nadie, salvo Gambardella quiere asumir su condición. El escritor y periodista (trabaja en un periódico de moda) observa en una inquietante soledad como los miembros de su "club" comen, beben y siguen bebiendo mientras continúan consumiendo los placeres de la vida como si no hubiera mañana. Así, a los largo del filme, nuestro protagonista participa directa o indirectamente en una serie de acontecimientos que el realizador (Paolo Sorrentino) acompaña con espectaculares imágenes de Roma y una banda sonora clásica de altura. La luces y las sombras de la fotografía de la película nos trasladan a ese último encuentro del escritor con el amor de su vida, la bella dama de melena rubia que dice tener la profesión de "ser rica". Tras pasar una noche con ella, mientras ella se disculpa por no ser "buena en ello", él le contesta que "es mejor no se bueno en algo" por qué la imperfección es mejor que la perfección en un mundo lleno de personas que quieren ser perfectas.
Ella le habla de sus fotografías que realiza como hobby; él, le asegura que es muy interesante. Mientras la dama va en busca de su ordenador para enseñarle sus fotos (íntimas) Jep pronuncia su tajante reflexión sentenciando la situación: "lo que aprendí tras cumplir sesenta y cinco años es que no quiero perder mi tiempo en hacer cosas que no me gustan...". Así, abandona la lujosa casa romana de su amor y se dirige hacia su casa paseando por su ciudad y observando el amanecer. Por la mañana, un hombre de negro le espera en su portal: es el marido de ella, dice que acaba de morir su mujer...
Así, con el corazón abatido y vació de tanta mundanidad, nuestro héroe siente que le falta algo y a lo mejor quiere volver a escribir. Conoce a una stripper de cuarenta y dos años que aún sigue bailando en el local de su padre, asiste al funeral del hijo de una de sus amigas, le enseña a su nueva conocida los mejores museos de Roma, porque conoce al señor de "las llaves" que sirve a las "princesas" y les abre las puertas a la luz de velas hacia las mejores obras de arte...Todo ello sin faltar a las reuniones de la planta noble que siguen su rumbo sin destino.
La película nos acerca a la alta sociedad romana y sus costumbres. El maniqueísmo, la falsedad, la eterna búsqueda del placer por placer, la falta de valores, la promiscuidad, los falsos profetas, los artistas mediocres y la ausencia del sentido de realidad es la trama principal de esta obra. Pero mirando con poco más de atención podemos observar el por qué de sus acciones, el por qué de su aparentemente desenfadad vida. Según Gambardella es la vía de escape de aquellos que se resignaron con su condición de mediocres, que aunque muestren intentos de debatir y preocuparse sobre lo divino, ellos son demasiado humanos, demasiado mundanos, por eso se contentan con las charlas vacías y las burlas cotidianas para así olvidar su propia mediocridad, Para olvidar que ellos no aportan nada, tan solo son los presentes de los continuos bailes de los lujosos salones con sus rostros maquillados y sus vestidos brillantes.
Desde un punto de vista cinematográfico, la película es una continua galería de imágenes ambientadas con buena banda sonora que acentúan cada una de las escenas claves. Gambardella es interpretado por el maestro Toni Servillo (Il Divo, Viva la Libertà) que una vez más nos muestra sus dotes camaleónicas para encarnar a cualquier tipo de personaje. Le acompañan una serie de grandes secundarios que hacen posible la construcción de ese mundillo reservado para unos pocos privilegiados. Decir que el director sabe firmar la noche y también la ciudad. Las escenas son muy bellas y la atmósfera que se respira nos transportan a las entrañas de la Roma bella y legendaria con sus amaneceres dorados y sus noches estrellados.
Los críticos dicen que la cinta es un merecido homenaje a las grandes películas italianas de la Edad de Oro (Fellini, Antonioni, Pasolini, etc.). La película ha ganado Globo de Oro y Óscar a la mejor película en lengua no inglesa en el año 2013. El director
La película nos acerca a la alta sociedad romana y sus costumbres. El maniqueísmo, la falsedad, la eterna búsqueda del placer por placer, la falta de valores, la promiscuidad, los falsos profetas, los artistas mediocres y la ausencia del sentido de realidad es la trama principal de esta obra. Pero mirando con poco más de atención podemos observar el por qué de sus acciones, el por qué de su aparentemente desenfadad vida. Según Gambardella es la vía de escape de aquellos que se resignaron con su condición de mediocres, que aunque muestren intentos de debatir y preocuparse sobre lo divino, ellos son demasiado humanos, demasiado mundanos, por eso se contentan con las charlas vacías y las burlas cotidianas para así olvidar su propia mediocridad, Para olvidar que ellos no aportan nada, tan solo son los presentes de los continuos bailes de los lujosos salones con sus rostros maquillados y sus vestidos brillantes.
Desde un punto de vista cinematográfico, la película es una continua galería de imágenes ambientadas con buena banda sonora que acentúan cada una de las escenas claves. Gambardella es interpretado por el maestro Toni Servillo (Il Divo, Viva la Libertà) que una vez más nos muestra sus dotes camaleónicas para encarnar a cualquier tipo de personaje. Le acompañan una serie de grandes secundarios que hacen posible la construcción de ese mundillo reservado para unos pocos privilegiados. Decir que el director sabe firmar la noche y también la ciudad. Las escenas son muy bellas y la atmósfera que se respira nos transportan a las entrañas de la Roma bella y legendaria con sus amaneceres dorados y sus noches estrellados.
Los críticos dicen que la cinta es un merecido homenaje a las grandes películas italianas de la Edad de Oro (Fellini, Antonioni, Pasolini, etc.). La película ha ganado Globo de Oro y Óscar a la mejor película en lengua no inglesa en el año 2013. El director
Paolo Sorrentino es uno de más destacados realizadores italianos del momento. Entre sus películas (pocas) anteriores destacan "Il divo" (con Toni Servillo en papel del primer ministro italiano Andreotti) y "This must be the place" (con Sean Penn). Espero que disfruten de la película. A continuación, les dejo un fragmento de las reflexiones de Gambardella:
“Termina siempre así, con la muerte. Pero antes, hubo vida. Escondido debajo el bla, bla, bla, bla. Y todo sedimentado bajo los murmullos y el ruido. El silencio y el sentimiento, la emoción y el miedo. Los demacrados, caprichosos destellos de belleza. Y luego la desgraciada miseria y el hombre miserable. Todo sepultado bajo la cubierta de la vergüenza de estar en el mundo. Bla, bla, bla, bla. Más allá, está el más allá. Yo no me ocupo del más allá. Por tanto, que esta novela dé comienzo. En el fondo, es sólo un truco. Sí, es sólo un truco.”